Sonríe, pasémonos el día hablando de nuestros sueños, de lo que queremos ser, o de como nos gustaría que todo fuera en este momento. Date cuenta de una vez de que esto solo se vive una vez, sí, sé que es lo típico, pero es verdad. Tan solo ven conmigo, no te dejes aconsejar, tan solo escucha a tu corazón. No le pongas nombre a lo que somos, ni fronteras. Paseemos, comámonos un helado, y olvida por un día esa estúpida parte de nosotros llamada conciencia.
Sabes cuales han sido mis mejores regalos?
Una
sonrisa cuando mas la necesitaba, un
beso inesperado, que me hagan descojonarme de la
risa por cualquier gilipollez, poder
abrazar cuando todo va mal, un toque a las tres de la madrugada, un sms que te saca tu
mejor sonrisa, ponerte nerviosa cuando te dice: ''Oye, tengo que decirte algo...'', y
sentir ese tripi que te sube por el cuerpo.