Está bien, lo admito. He llorado para dar pena alguna vez, y he fallado a quienes confiaban en mi. He sido la más falsa de todas y he intentado joder la vida a mucha gente, pero al final nunca he podido. He sido cruel con quien no lo merecía. Lo admito, he dicho enamorarme muchas veces, aunque ninguna fue cierta. He dicho mentiras y me he callado verdades por orgullo y por interés propio. He sido superficial, creída y estupida. No siempre me he comportado como debía. Lo admito, me han gustado miles de sonrisas, pero ninguna como la tuya.
Detesto muchas cosas en la vida, una de ellas es oír un "no puedo". ¿No puedo? ¿Enserio eres capaz de decirme no puedo?. ¿Respiras? ¿Andas? ¿Ves? ¿Oyes? ¿Saboreas? Si a todas esas preguntas la respuesta es un Sí, no entiendo porque dices "no puedo". Si respiras estas viva; si andas, empieza la marcha para perseguir tus sueños; si ves, mira bien a tu alrededor para esquivar las piedras, si oyes, ponte unos cascos y la música a todo volumen para ni oír de lejos las críticas; si saboreas pégale un buen bocado a la vida y disfruta del placer de los grandes momentos y ríete si mientras vas andando recorriendo el camino te caes. Ahora dime, ¿todavía tienes la cara de decirme no puedo sin haberlo intentado? ¡Sal a comerte el mundo! y si necesitas un apoyo en el que descansar...aquí tienes mi hombro.
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